No soy corredor. Eso muchos de vosotros lo sabéis. Mis piernas están mucho más acostumbradas a pedalear que a desplazar mis 92 kilos sobre el asfalto. Más acostumbradas a devorar kilómetros de caminos y bajadas de vértigo que a sumar metros que pasan muy lentamente en mi cerebro. Nunca se […]