El descanso, ese gran desconocido.
Si amigos y amigas que practicáis y entrenáis algún tipo de deporte, hoy os voy a hablar del descanso. ¿Os suena? Seguro que alguna vez habréis oído hablar de él. No, no es una leyenda urbana, realmente existe y es beneficioso.
Hace unos pocos días me jactaba de haber superado los 300 kilómetros en el mes de mayo. Quizá no sean muchos para algunos pero sí que lo son para mí. Pues como si el “karma” hubiera entrado en acción el 2 de junio tuve un bajón físico de los que hacen historia. Una sensación como las astenia primaveral pero a lo bestia.
Me preocupé, claro está, pero la preocupación duró 5 minutos. Eché la vista atrás y me acordé de los últimos meses, quizá del último año y medio enlazando entrenamientos y objetivos sin casi dar descanso a mi cuerpo serrano (si, no llego todavía a ibérico y menos a bellota).
Es cierto que nos gusta alcanzar los objetivos que nos marcamos y que siempre hay alguno a la vista, si no está a la vista ya se encargan los “amigos” de mostrárnoslos de manera más o menos sutil aunque casi siempre hay de por medio un “no hay huevos”. Pero tenemos que ser conscientes de que nuestro organismo tiene un límite (aunque nos creamos Josef Ajram y lo busquemos continuamente).
Tenemos que ser realistas, conscientes y prudentes. No podemos estar continuamente entrenando “a saco” para llegar a una carrera, después a la siguiente, luego a otra y así hasta el infinito. Si lo hacemos, tarde o temprano vamos a cascar, ya sea en forma de lesión o en saturación deportiva (lo que viene siendo “quemarse”).
¿Qué cuanto tienes que descansar? Ufffff… cada persona es un mundo, pero mi experiencia me dice que al menos un día o dos a la semana, nunca meter dos entrenamientos duros seguidos y si podéis al menos un par de semanas cada seis meses de “retiro” deportivo ( al menos del deporte que entrenéis habitualmente).
Seguro que encontraréis profesionales que os aconsejaran y os guiarán de manera mucho más precisa así que no dudéis en contar con ellos para llevar un entrenamiento responsable y saludable. Sin salud no podemos hacer todo aquello que nos gusta hacer, ya sea correr, nadar, montar en bici, jugar al tenis, al fútbol, a la petanca o incluso los más atrevidos al “curling”.
Y después de este esfuerzo para escribir este post, ¡¡me voy a descansar!!
Una idea sobre “El descanso (por @Albbarrantes)”
«Descansar también es entrenar» se quedo grabado a fuego en mi cabeza. No está de mas que nos lo recuerden de vez en cuando.Gracias!