A pocos os resultará ya desconocido este proyecto solidario. Creo que los que quedaban sin saber cómo son las quedadas de los Drinkingrunners se han enterado este domingo. Los que llegan por primera vez se enganchan sin remedio. A todos se les nota que no sólo han disfrutado, han comprendido en apenas unas horas que quieren unirse a este grupo de locos que nos pasamos algunas mañanas de domingo corriendo, escuchando a Pablo Carmenado con un megáfono, participando en sorteos de regalos y ayudando a tanta gente que en estos momentos no son tan afortunados como nosotros. Y sin olvidar a Luis Blanco, presentador de A tu ritmo y la gran difusión que le da desde su programa a este proyecto. Aprovecho para agradecerle todo lo que está haciendo por los corredores populares.
Dicho así puede resultar pobre, o incluso parecer un teatrillo de barrio.
Ya he escrito mucho sobre la estructura de estas quedadas, tanto en mi blog, como en el de los Drinkingrunners: El #runningsolidario, una gran realidad. Hoy voy a hablar de sensaciones.
Esta vez sí que es imposible mencionar a todos los que habéis compartido conmigo este domingo. Me olvidaría de la mitad y ocuparían mucho más los nombres que el resto del texto. Los habituales ahí seguimos, otro año más, con las mismas ganas y con nuevos proyectos, porque esta segunda fase terminará en Sevilla el 23 de febrero de 2014 y no en Madrid. A los nuevos, agradecerles la confianza y que no dudasen en madrugar y pasar a descubrir cómo son las quedadas y colaborar.
Llegar al aparcamiento del Zoo de la Casa de Campo y descubrir el tenderete montado, con la ya famosa bandera de los Drinkingrunners, todos de verde, con esas sonrisas y el cariño con el que van recibiendo a cada uno de los corredores ya es grande; si pensamos en que de esa forma tan pobre se consiguieron el año pasado 7.000 kilos de alimentos, que se donaron al Banco de Alimentos, hace que me emocione y que por eso y muchos otros motivos no quiera perderles de vista, a ninguno. Han movido a que muchos de nosotros dejemos nuestra comodidad de mirar hacia otro lado y al menos nos comprometamos a aportar alimentos, a conseguir que otros crean también en este proyecto y a poner ilusión en que esto salga, que es fundamental en las épocas malas, la ilusión.
Ha habido ausencias de miembros del equipo como Javier Carmona y Rafa RS, que disfrutaban del puente. Y de los que viven lejos como Espíritu González, Julián Hurtado y Javier Gómez, ¡cuánto os echamos de menos cada vez que nos reunimos todos!
Ver a los voluntarios del Banco de Alimentos allí, con sus chalecos, esperando a que terminemos de correr, de saludarnos, … para recoger los alimentos ¡es admirable! Tanta generosidad con quienes con seguridad ni conocen. Al menos nosotros corremos y nos divertimos. Ellos pasan algo de frío y esperan.
Padres, madres, que aparecen con sus hijos, fomentando el deporte, la solidaridad, el compañerismo, como Elena Sanz y Toni Perlado, Javier Álamo, Pablo Carmenado, Carlos Siguero…
Como en todas las quedadas tres grupos con diferentes ritmos de carrera para que cada uno elija cómo desea o puede correr. Esta mañana hemos contado con el atleta Víctor García (@victor3000obst), medalla de bronce en el Campeonato de Europa en Helsinki 2012 de 3.000 metros obstáculos y olímpico en Londres 2012. Participa en esta ocasión dirigiendo el entrenamiento y dando consejos a los corredores que estamos aquí. A los muy avanzados les ha llevado a 4’15”. El resto hemos corrido de forma un poco más humilde. Destacar lo cercanos que son nuestros atletas profesionales y lo que se implican con los populares. Víctor ha creado su Escuela de Running, y realiza los entrenamientos en el Parque de El Retiro. Más información en su página: VG Running.
Cada vez se unen más marcas. Eso nos da una idea de que el proyecto es importante y también quieren estar con #kmsXalimentos.
Y los medios 20minutos.es, ElMundo.es, EuropaPress, Runner’s que están contribuyendo a que el proyecto tenga más voz y llegue aún a más gente.
Creo escuchar a Pablo Carmenado que si crecen los regalos de los sorteos suben los participantes en las quedadas. Ahí tengo que contradecirle. Llevo asistiendo desde los inicios y nunca me ha tocado nada. Igual esa es la clave para que no deje de venir, o puede que algo más haya aquí que llevarnos unas zapatillas, o una camiseta para querer volver y pensar cada día que este proyecto es de muchos de nosotros, porque así lo sentidos, aunque la idea, como siempre, sea sólo de ¿dos?
María Caballero